*El gobierno estatal se suma al llamado de la SRE y de la presidenta Sheinbaum para evitar una mayor escalada del conflicto.

Puebla, Pue.- El Gobierno del Estado de Puebla, encabezado por el gobernador Alejandro Armenta, expresó su respaldo a la política exterior impulsada por la presidenta Claudia Sheinbaum y a la postura de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) para buscar soluciones diplomáticas ante el conflicto en Medio Oriente, luego del reciente ataque de Estados Unidos a instalaciones nucleares en Irán.

A través de un mensaje oficial publicado en redes sociales, la administración estatal subrayó la importancia de evitar una mayor escalada en la región y reiteró su compromiso con los principios constitucionales que guían la política exterior de México: la no intervención, la solución pacífica de controversias y el respeto a los derechos humanos.

“Nos sumamos al llamado de desescalar las tensiones y reiteramos nuestro compromiso con los principios constitucionales de política exterior. La restauración de la convivencia pacífica entre los Estados es una prioridad global”, se lee en el pronunciamiento oficial del Gobierno de Puebla.

La postura se dio a conocer tras los bombardeos realizados por Estados Unidos a los complejos nucleares de Fordo, Natanz e Isfahán, acción que el presidente Donald Trump calificó como un “éxito militar” y advirtió que podría repetirse si Irán no busca un acuerdo de paz. En este contexto, la SRE mexicana hizo un llamado urgente al diálogo diplomático y alertó sobre los riesgos de un conflicto mayor en la región.

Finalmente, el Gobierno de Puebla afirmó que la paz se construye con respeto, diálogo y cooperación internacional, sumando su voz a la de otras autoridades mexicanas que piden evitar una crisis global. “#PorAmorAPuebla #PensarEnGrande”, concluye el mensaje oficial difundido en plataformas digitales.

*La SRE llama a detener el conflicto entre Irán, Israel y EE. UU. e insiste en resolver por la vía diplomática.

CDMX.- Ante el reciente conflicto armado entre Irán, Israel y Estados Unidos, el Gobierno de México hizo un llamado urgente a detener las agresiones y abrir canales de diálogo diplomático. A través de un comunicado difundido en su cuenta oficial de X (antes Twitter), la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) expresó su preocupación por la creciente tensión en Medio Oriente.

“La @SRE_mx hace un llamado urgente al diálogo diplomático por la paz entre las partes involucradas en el conflicto de Medio Oriente. En apego a nuestros principios constitucionales de política exterior y a la convicción pacifista de nuestro país, reiteramos nuestro exhorto a desescalar las tensiones en la región”, escribió la dependencia.

El posicionamiento de México ocurre tras los recientes ataques aéreos ejecutados por Estados Unidos contra instalaciones nucleares en Irán, que se suman a una serie de agresiones previas entre Irán e Israel. Según el presidente Donald Trump, los bombardeos fueron en respuesta a supuestos preparativos nucleares del régimen iraní y podrían repetirse si Irán no busca un acuerdo de paz.

La SRE también informó que las representaciones diplomáticas mexicanas —embajadas y consulados— se mantienen alerta para atender a ciudadanos mexicanos que residan o estén de paso en Medio Oriente.

“Permanecen atentas y en permanente contacto con las y los connacionales que residen o transitan en la región para auxiliarles y brindarles la mayor atención consular posible”, señaló la cancillería.

México, fiel a su política exterior basada en el respeto, la no intervención y la solución pacífica de controversias, ha insistido en que la prioridad debe ser restablecer la convivencia pacífica entre los Estados involucrados. Hasta el momento, no se ha reportado ningún mexicano afectado directamente por los hechos.

México pide diálogo y paz ante escalada de tensión en Medio Oriente

*El presidente ordenó bombardeos a instalaciones nucleares iraníes y reimpulsó vetos migratorios en EE. UU.

Washington, D.C.— En una semana cargada de decisiones que sacudieron el panorama internacional, el expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, anunció una serie de ataques aéreos dirigidos contra instalaciones nucleares en Irán y reinstauró medidas migratorias que incluyen vetos de viaje a ciudadanos de varios países.

La operación militar, llevada a cabo en las primeras horas del viernes, tuvo como blanco los complejos nucleares de Fordow, Natanz e Isfahan. Según el propio Trump, las bombas fueron lanzadas desde bombarderos B-2 y causaron “daños significativos”. “Fue un éxito espectacular”, declaró en una conferencia de prensa, donde también advirtió que Estados Unidos “no dudará en actuar de nuevo” si Irán continúa avanzando en su programa nuclear.

La comunidad internacional ha reaccionado con preocupación. El gobierno iraní condenó los ataques como “una agresión injustificada” y prometió responder “en tiempo y forma”. Por su parte, la ONU convocó a una sesión urgente del Consejo de Seguridad para analizar las implicaciones del bombardeo.

Simultáneamente, Trump firmó una proclama presidencial que reestablece una política migratoria restrictiva que había sido derogada en administraciones anteriores. Esta nueva versión prohíbe la entrada de ciudadanos de una docena de países, en su mayoría de mayoría musulmana, e impone vigilancia reforzada para visitantes que excedan su visa en EE. UU.

“El mundo debe estar a salvo, y nuestra nación primero”, afirmó Trump, quien ha reiterado su intención de mantener una postura “firme y patriótica” en su nuevo mandato.

En tanto, grupos de derechos humanos y organizaciones civiles han calificado las medidas como “xenofóbicas” y “una amenaza a la estabilidad global”, mientras que aliados políticos han aplaudido la “valentía y liderazgo” del expresidente.

Con estas acciones, Trump deja claro que no planea moderar su estilo ni sus decisiones. La ofensiva en Irán y la mano dura migratoria podrían marcar un punto de quiebre en la geopolítica actual y avivar tensiones ya existentes en Medio Oriente y otras regiones del mundo.