Luís Gabriel Velázquez/ Hace 30 años eran como el agua y el aceite; pero una tragedia los unió, los hizo alzar la voz sin importar esos antecedentes.


La BUAP y la UPAEP, así como alumnos de otras instituciones públicas y privadas, salieron a las calles para exigir seguridad.
Se estima que fueron 6 mil los universitarios que 26 de febrero del 2020, en diferentes contingentes gritaron ¡YaBasta!.


Pararon labores en el CCU de la BUAP, en el centro se integraron las facultades de Filosofía y Letras, además de Psicología.
En Ciudad Universitaria no hubo actividades, pero si un grupo que colocó ofrendas y pasó lista de los estudiantes asesinados en Santa Ana Xalmimilulco.


Y como parte del núcleo de esta tragedia, la protesta fue más significativa en el área de la salud; Medicina, Estomatología, Fisioterapia y Química.
En el barrio de Santiago la UPAEP se unió a las manifestaciones, pararon labores y contaron con el apoyo de la rectoría.


Emilio Baños Ardavín reconoció a los padres de las víctimas ” que han dado un testimonio fuera de serie”, dijo en una rueda de prensa convocada este medio día.
El poder legislativo recibió a un contingente , y garantizó una reunión entre estudiantes y secretarios de seguridad estatal y del municipio de Puebla.


Pese a los cierres viales, suspensión de clases y cortes a la circulación; los universitarios encontraron eco de diferentes sectores.


A un año de la tragedia, la herida sigue abierta. Hasta hoy están detenidos, Pablo de Jesús N, de 46 años de edad; Ángel N, de 23; Lisset N, de 22, y Felipe N, alias “El Pirulí”, de 36 años de edad, presunto líder de la banda delictiva que último a los tres jóvenes.
Los acusados de esos homicidios están en espera de fecha para la audiencia procesal, retrasada, dicen, por pandemia.